Real Alcázar de Sevilla, una visita de cine por el monumento más bonito de la ciudad.


   Creo que ya lo he dicho alguna vez en el blog, si hay un lugar en Sevilla cuya visita es totalmente imprescindible, y mira que Sevilla tiene muchos sitios maravillosos para visitar, este es sin duda el Real Alcázar, para mí el monumento estrella de la ciudad.

   El Real Alcázar de Sevilla es el palacio real en uso interrumpido más antiguo de Europa, siendo su aspecto actual el resultado de multitud de modificaciones y ampliaciones procedentes de diferentes etapas históricas, que empezaron ya con un primer recinto omeya datado en el año 913.

   Los muros de este conjunto monumental están cargados de la historia de España, pero en este post les quiero hablar de otro tipo de historia que también encierran estos muros, la historia de algunas de las películas y series que se han rodados en el Real Alcázar. ¿Sabían por ejemplo que la primera superproducción que se rodó en España se grabó en buena parte aquí en 1.916?

   Efectivamente se trata de la película La Vida de Cristóbal Colón y su descubrimiento de América, una producción franco-española que fue la película más cara de su época con un presupuesto superior al millón de pesetas. Por supuesto se trata de una película muda y en blanco y negro, piensen que el invento de los hermanos Lumière fue apenas en 1.895.
Escena La Vida de Cristóbal Colón 1916


   En la película el Real Alcázar hace las veces de la Alhambra de Granada, de hecho en el patio se observa una fuente de leones parecida a la de la Alhambra, pero las imágenes no son de la Alhambra, sino que son del Real Alcázar de Sevilla. No obstante, para ser justos, ambos monumentos han hechos el papel del otro en numerosas producciones 

   Y esto es lo genial, que podemos ver cómo ha ido cambiando el espacio con el pasar de los años, por ejemplo, hoy en día ya no queda rastro de esa fuente renacentista que estuvo en el patio de las Doncellas. No sólo eso, si se fijan el suelo del patio, en 1.916 se podía pasear sin problemas, pero ahora no tan fácil debido a que hay dos niveles excavados, y además en el centro del patio hay un canal con agua que no existía hace 100 años.

    En realidad, este patio, que es el centro del espacio público del Palacio del Rey Don Pedro I, estuvo cubierto por una solería de mármol y con la fuente que vemos en la película de 1.916 durante más de 500 años, pero en el 2.005, se hicieron unas excavaciones en el mismo para devolverlo a su estado original del siglo XIV, y esto me da pie a contaros otra curiosidad cinéfila. 

    Veréis, precisamente en 2.005 se rodaba en el Alcázar una de las grandes producciones de Hollywood de ese año, El Reino de los Cielos (Kindom of Heaven) de Ridley Scott.
Escena El Reino de los Cielos 2.005

   Y resultó que cuando los encargados de ojear las localizaciones para la película vinieron al Alcázar, el patio estaba todo enlosado con mármol y era perfecto para el banquete en el Palacio de Jerusalén que sale en la película. 

   El problema es que hubo retrasos en la filmación y cuando finalmente vinieron a rodar, se encontraron con que el mármol había sido retirado y había dos enormes hoyos en los laterales, ya que estaban sacando a la luz el patio original del siglo XIV.

   Por supuesto a Riddle Scott aquello "le importaba un comino" y exigió que rellenaran de nuevo los huecos y pusiesen todo como estaba cuando vinieron a verlo la primera vez. Por supuesto eso era algo impensable para los responsable de la restauración.

   Finalmente la sangre no llegó al río y se optó por cubrir los huecos ya excavados con tablones de madera y pintarlos como si fuese de mármol, y lo cierto es que dan bastante bien el pego.
Escena de El Reino de los Cielos 


   De todas formas, no sufran demasiado por Ridley Scott, porque el rodaje de su película fue una auténtica pesadilla para los miembros de seguridad del Alcázar. Y es que, ¿ven los calderos y antorchas ardiendo que salen en la película?, pues en un momento dado del largometraje saltaron las alarmas porque provocaron un incendio dentro del monumento. Increíble que algo así suceda.

   Por suerte la cosa quedó en un susto, pero lo americanos no llegaban a entender, y de hecho se enfadaron porque se les obligasen a parar el rodaje por "un pequeño fuego", o tampoco comprendían que no pudiesen mover el mobiliario a su antojo, o clavar decorados en unas paredes con siglos de historia, por cierto que hicieron todas esas cosas como si estuviesen rodando en, que sé yo, en una cabaña de Arkansas.

   Desde luego el rodaje del film estuvo gafado, incluso sucedió que el embajador de Nigeria tuvo una recepción oficial en el Real Alcázar en esas fechas, y un portero pensando que eran extras de la película les prohibió el paso, menos mal que enseguida alguien se dio cuenta del error y les permitieron pasar jeje.

   Con esto no quiero decir que los rodajes americanos sean todos iguales, en absoluto, de hecho el trato del equipo de Juego de Tronos fue simplemente exquisito. 
Escena de Juego de Tronos


   Por ejemplo esta escena en el que Jaime Lannister se reúne con los Martell para negociar el retorno de Myrcella Lannister se rodó en la Salón de los Embajadores. Para poder filmarla el equipo necesitaba mucha luz artificial, pero para evitar instalar estructuras peligrosas, usaron un enorme zeppelin para colgar los focos y no tocar las paredes o el fantástico techo. Además previamente se aseguraron que el gas del zeppelin no fuese inflamable para evitar cualquier tipo de daño en la hermosa cúpula del salón.
Escena Juego de Tronos


   
Esta sala en particular era en realidad el salón del trono de Don Pedro I donde recibía a las personalidades más importante, de modo que realidad y ficción coincidieron en la ubicación principal.

   La sala cuadrada representa la Tierra, mientras que la cúpula dorada sería el Universo. Y si se fijan justo debajo de la cúpula hay muchos retratos que corresponde a monarcas españoles pintados por Diego de Esquivel en 1.599.

   Volviendo a Juego de Tronos, deciros que fabricaron aquí toda la vajilla que se ve en la escena y que la comida la hizo una catering inglés especializado en comida medieval. Desde luego no estaban faltos de recursos, pero como digo también fueron muy prudentes y responsable para respetar el patrimonio.

    Prueba de esto es que dieron credenciales de colores a los trabajadores del Real Alcázar, y los que tenían tarjeta negra podían detener cualquier escena, por costosa que fuese, si observaban que se estaba poniendo en peligro cualquier parte del monumento...y no, no hizo falta parar ninguna de las escenas porque lo tenían todo muy estudiado.

   Otro ejemplo lo encontramos si salimos a lo que en la ficción eran los Jardines de Agua de Dorne
Escena de Juego de Tronos


   Fijaos en la Fuente de Mercurio, HBO en un principio pretendía teñir el agua de color azul oscuro y pidieron permiso para poder hacerlo. Para ello el producto que se iba a usar era un tinte ecológico y efímero que es muy utilizado en los rodajes y que se evapora en unos días. Además es muy seguro y no afecta ni a las estructuras ni a las carpas que habitan el estanque. Pues bien, se les concedió tal permiso, pero finalmente no lo usaron por precaución, y porque era tan suave que en realidad ni se apreciaba en pantalla.

   Os contaré una curiosidad más de Juego de Tronos, ¿veis algo llamativo en esta otra escena de los jardines?
Escena de Juego de Tronos
   Me refiero claro está aparte de Jaime Lannister y Bronn. Los más fanáticos ya se habrán dado cuenta que encima de la puerta de entrada se observa el sol rojo atravesado por una lanza, emblema de la Casa Martell de Dorne. Pues bien, esta tan bien integrado este decorado que se quedó varias semanas después del final del rodaje, y no fue detectado por ningún visitante durante todo este tiempo.

   Y es que a veces el decorado de cine se queda un tiempo en el Real Alcázar, pero otras veces se queda para siempre. Por ejemplo, ¿os suena la serie Ciudad Esmeralda / Esmerald City?
Escena Ciudad Esmeralda

   Probablemente no os suene de nada, y es normal si tenemos en cuenta que se trata de una serie de la NBC estrenada el 6 de enero del 2017 y cancelada el 3 de marzo de ese mismo año jeje. La verdad es que duró menos que una pompa de jabón y fue un fracaso de público y crítica, pero al menos sí tuvieron muy buen ojo al elegir algunas de sus localizaciones, muchas de ellas situadas en España como el Parque Güell de Barcelona, El Torcal de Antequera de Málaga, las casas cuevas de Guadix de Granada o el Cabo de Gata de Almería.

   La serie es, o mejor dicho era, una versión moderna y más oscura de la famosa saga literaria del mago Oz, y en su episodio 3, Dorothy visita el Castillo de la Bruja del Este, cuyo exterior es en realidad el Castillo de la Calahorra en Granada, pero su interior es, por supuesto el Real Alcázar de Sevilla al que le añadieron algún que otro retoque digital.
Escena Ciudad Esmeralda   
   Pues bien, los productores de la serie solicitaron, sin cortarse un pelo, pintar la bella fachada del siglo XIV del Palacio del Don Pedro I de color verde, por que les veía bien para la trama...¿se imaginan?. Por supuesto recibieron una rotunda negativa, pero a pesar de ello no se dieron por vencido y solicitaron cubrir la fachada con una lona verde, cosa que también fue denegada.

   Al final no sé el motivo de tanto interés por el verde, pero solucionaron la escena poniendo unos limoneros en las paredes para dar un toque y listo...
Escena Ciudad Esmeralda


   El caso es que como los maceteros pesaban mucho, pues decidieron donárselo al Alcázar y desde entonces se han convertido en parte del monumento.

   De todas formas no es para menos que se marcarse un detallito con el monumento los de Esmeralda City, porque resulta que en un momento dado del capítulo 3, el Castillo de la Bruja del Este se empieza a derrumbar. Por supuesto utilizan efectos digitales para desmoronar el Real Alcázar y el Castillo de la Calahorra, sin embargo, para dar más realismo al efecto de derrumbe, decidieron por propia su cuenta, tirar un jarrón falso desde una segunda planta por un hueco de escalera.
Escena Ciudad Esmeralda


   Total que el jarrón cayó por el hueco de esta escalera, que no es visitable por el público, y como no podía ser de otro modo rompió un trozo de azulejo. La broma fueron 500€ que sufragó la póliza de seguro de la productora.

   En fin, como os contaba hay decorados de producciones que han pasado a formar parte del propio monumento, como los limoneros, pero hay otro decorados que lleva mucho más años integrado en el Real Alcázar. Para encontrarlos nos tenemos que remontar 60 años a la película de 1.962 Lawrence de Arabia.
Escena Lawrence de Arabia


   
En esta película podemos ver esta sala que es conocida como la Sala de las Bóvedas porque conserva sus bóvedas originales, pero lo curioso es que las lámparas no son para nada originales, sino que fueron instaladas por el equipo de la película de Lawrence de Arabia, y como quedaban bastante bien integradas, pues ahí siguen después de todo este tiempo, y eso que no son de hierro como aparentan sino de cartón piedra, increíble ¿verdad?.

   Otra decorado que todavía está dando vueltas por el monumento es el biombo que pueden ver al lado de la puerta en el fotograma que os muestro arriba. Ese biombo esta guardado en una de las salas del Real Alcázar.

   Antes de continuar con los decorados, os contaré otra curiosidad de esta sala, y es que también se la conoce como la Sala de las Fiesta porque aquí se celebró el convite de la boda de Carlos V con Isabel de Portugal en 1.526. Como curiosidad os diré que algunos asistentes a la boda recibieron en su invitación una nota que decía que si el día de la boda llovía no se diesen por invitados, porque básicamente los que estaban a cubierto en esta sala eran invitados preferentes, mientras que los menos importantes estaban en el jardín a merced del tiempo y más alejados de los novios.

   Pero volviendo al tema de los decorados, esta vez me voy a remitir a una serie mucho más reciente,  concretamente del año 2020, me refiero a La Mona Guerra / Warrior nun de Netflix. 
Escena La Monja Guerrera

   Esta escena corresponde al último capítulo de la temporada 1 de la serie, y en ella podemos ver la Sala de los Bóvedas con las lámparas de Lawrence de Arabia, y que representa, ni más ni menos que el Vaticano.

   Pero lo os quiero enseñar ahora es la Sala de los Maestres, una sala que no se suele enseñar a las visitas del Real Alcázar, pero que en esta ficción se puede ver ya que aparece como el despacho del Papa donde se prepara para dar un discurso frente a la multitud en una concurrida Plaza de San Pedro.
Escena de la Monja Guerrera.


   De esta importante sala me gustaría que se fijasen en varias curiosidades. Para empezar la puerta que ven al fondo en la pared de la derecha entre las cortinas es en realidad una puerta falsa que colocaron el equipo de La Monja Guerrera y que de momento ahí sigue.

   Por otro lado, el armario amarillo que pueden ver en el fondo tanto de la escena de la serie como en mi fotografía no es un armario, es en realidad un decorado para tapar el aire acondicionado. Además si se fijan en las fotos colgadas en la pared del fondo, pueden ver que son retratos de Don Juan Carlos y Doña Sofía, pero en la ficción fueron suplantados por otros cuadros de temas religiosos. Los que sí respetaron son los demás cuadro de la sala, de hecho el Papa cuando entra en la sala por la puerta falsa que os comentaba antes, se queda un rato observando ambos cuadros.
Escena de la Monja Guerrera.

   Me acabo de dar cuenta que prácticamente sólo he hablado de producciones americanas, pero por supuesto también se han rodado en el Real Alcázar numerosas producciones nacionales, por ejemplo una de las más recientes fue la serie La Peste de Movistar+ estrenada en 2.018 y ambientada en la Sevilla del siglo XVI.
Escena La Peste


   Esta estancia es la Alcoba Real, que como vemos está divida en dos grandes habitaciones. El Rey utilizaba en verano la pare interior, más fresca y en invierno la exterior para aprovechar más la luz.

   El rodaje de La Peste en el Real Alcázar generó cierta polémica porque los productores quería estar exentos del pago de tasas dado que entendían que fomentaban la imagen de Sevilla, y que tendrían un fuerte impacto turístico. Esta exención de tasas por imagen fue la que se aplicó por ejemplo a Juego de Tronos, sin embargo en este caso la directora del monumento no lo consideraba igual y en un primer momento exigió el pago de la tasa estándar que ascendía casi a 200.000€, algo que era inasumible por la productora que anunció su marcha. Finalmente alcanzaron un acuerdo y tuvieron que pagar unas tasas que rondaban los 10.000€.

   Llegado a este punto, me gustaría contaros anécdotas de todas las producciones grabadas aquí, pero la lista es demasiado larga y no para de crecer, La mujer y el pelele (1959),  El viento y el león (1975), Rojos (1978), 1492 la conquista del paraíso (1992), El caballero Don Quijote (2002), Carmen (2003), Historia de España (2004), La chica de las naranjas (2009), Knight and day (2010), Carlos V (2013), La otra mirada (2018), Spanish princess (2018), etc...

   Sin duda los productores ven lo mismo que cualquiera que tenga la suerte de visitar el Real Alcázar de Sevilla, un espacio mágico que enamora a quien lo conoce, y por eso lo utilizan en sus obras.

   Cierro ya el post, pero antes me gustaría despedirme con un rincón tan especial que ha habido incluso directores que han cambiado su guión para incluir alguna escena de este sitio en sus proyectos. Me refiero a los Baños de Doña María...
Baño de Doña María, Juego de Tronos

Baño de Doña María, La Monja Guerrera

Baños de Doña María Ciudad Esmeralda

   Un rincón diferente y muy llamativo para la pantalla que además tiene una leyenda asociada ya que según cuentan, en 1.352, el rey Pedro I conoció y se enamoró a doña María de Padilla, una noble sevillana que llegó a ser reina después de su muerte. El rey, a pesar de estar casado, construyó unos aposentos a su amante en la zona mudéjar de palacio, y por lo visto a ella le encantaba bañarse desnuda en este lugar, de ahí el nombre.

   No se sabe si esta costumbre era verdad o no, lo que si es cierto es que tras la muerte de María, Pedro I declaró que ella fue su verdadera primera y única esposa, y anuló sus otros dos matrimonio legitimando su descendencia.

   Y con esta leyenda me despido hasta el próximo post. Espero que les haya gustado este recorrido de cine por el monumento más bonito de la ciudad.

   Hasta pronto.

Comentarios